De preparativos

[Inca] Que os parece ese de ahí? Es el más grande y parece más nuevo que el resto. Supongo que tendremos que cargar lo máximo posible de gasolina y de comida, así que más vale coger el más grande no?

[Franch] Por mi perfecto, tiene muy buena pinta.

Era un barco bastante grande, o eso nos parecía,  y con pinta de ser de cierto lujo. Debía medir aproximadamente unos 20 metros de largo por unos 4 de ancho. Tenía una zona de camarotes cerrada con llave, que Franch forzó con una barra de hierro y algunos golpes. Había una especie de mini comedor con 2 literas dobles dentro de unas especie de armario plegable, en total teníamos 4 camas individuales. Todo parecía estar en perfectas condiciones, aunque algo sucio de polvo por su desuso pero parecía estar bien. Los armarios estaban vacíos, no había latas de comida, pero si teníamos agua en el depósito de agua potable del barco. Mientras Franch se miraba la cabina del piloto arriba, por lo que subí a ver que había encontrado mientras las chicas se quedaban abajo organizando todo y buscando a ver que encontraban.

[Inca] Como está esto?
[Franch] Parece que está todo bien. E incluso he encontrado una copia de las llaves en un armario. Pero tenemos dos problemas importantes.
[Inca] Y eso?
[Franch] La primera, no tenemos batería para arrancar. Pero aunque tengamos, no tenemos gasolina para irnos. El depósito está en reserva.
[Inca] No lo veo tan mal eso?
[Franch] Sí?, y como quieres irte?
[Inca] Joder, estamos rodeados de otros barcos, me querras decir que no encontraremos ninguna batería ni gasolina? Vamos, no creo que todos estén igual, seguro que algo encontraremos.
[Franch] Es posible, pero no te confíes tanto. También es posible que hayan pasado saqueadores y se hayan llevado toda la gasolina de la zona, o que no encontremos ninguna batería con carga. Solo que falle una de las dos cosas no podremos marchar.
[Inca] Va, hombre!, ten fe!. Hemos llegado hasta aquí, y estoy seguro que encontrarás una solución a esto. Lo que hemos mirado abajo, y todo parece que está bien y el depósito de agua potable está casi lleno, pero no hemos encontrado nada de comida.
[Franch] Pues habrá que ir a buscar las cosas, no? -- decía con una sonrisa en la boca, por momentos se iba animando.
[Inca] Pues nada, vamos de nuevo a trabajar no? Tu sabes más de motores y esas cosas, buscas gasolina y batería. Mientras Sofía y yo  miraremos el restaurante de ahí delante del puerto a ver si encontramos comida. ¿Qué te parece?.
[Franch] Perfecto, pero vigilad. No os vayáis más allá y si sale algo avisad. No hemos visto ningún infectado en esta zona, pero eso no quiere decir que no estén. Y llevaos una pistola cada uno, recuerda los consejos, respira antes de disparar y apunta a la cabeza.
[Inca] Lo intentaré, pero me parece que si tengo que disparar haré de todo menos recordar nada…
Bajé de nuevo abajo a explicarles la situación y el plan a las chicas, las dos estuvieron de acuerdo, por lo que Sofía y yo salimos ya directamente del barco y nos encaramos al restaurante del puerto que estaba a apenas unos 200 metros.

[Inca] No te separes de mí, hemos de ir juntos al menos hasta que esté todo tranquilo.
[Sofía] Te aseguro que no pienso irme a ningún sitio, ya he tenido suficientes sustos por hoy.
[Inca] Si hay cualquier problema, vete corriendo, vale? ni me esperes, tu vete corriendo al barco. Y si por lo que sea  no puedes llegar, vete al agua, dudo mucho que esas ratas sepan nadar.
[Sofía] Que sí hombre… Ya te he entendido antes. Va, vamos para allá, que ya verás como al final no habrá nadie.

Sofía iba muy confiada, el no ver ningún infectado en toda la zona nos daba esa falsa sensación de seguridad que podía complicarnos las cosas.

Llegamos al restaurante, que estaba encima de una especie de almacén de playa, por lo que tuvimos que subir por unas escaleras de madera. Una vez arriba estaban todas las mesas de la terraza tiradas por el suelo como si hubiera habido una estampida en esa zona. Seguramente la gente tuvo que marcharse corriendo. Las puertas estaban cerradas con todos los cristales intactos, lo que nos daba una buena esperanzas de encontrar algo, alguien se molestó en cerrar el establecimiento antes de marcharse.

Hice señales a Sofía para que esperara ahí, volví a bajar las escaleras y tras encontrar una piedra lo suficientemente grande volví a subir. Lancé la piedra contra el cristal pero este apenas se hizo alguna raja. Finalmente, tras lanzarla unas 6 veces contra el mismo punto conseguimos romper el cristal en pedazos haciendo un buen escándalo. Me giré hacia el barco y ahí estaba Franch observando que había pasado, le hice una señal con el dedo pulgar para indicar que todo estaba bien y nos metimos para dentro del restaurante.

A diferencia de la terraza, aquí estaban todas la mesas y las sillas en su sitio, bien colocadas, con los manteles puestos y los cubiertos en su sitio, esperando a esos clientes que no llegarían nunca más. Hacía un fuerte olor a cerrado y humedad. Nos adentramos en la barra, todo intacto, lleno de botellas de todo tipo, y algo que parecía fruta pasada en algunas zonas. Me quedé mirando las neveras, a ver que podía encontrar, mientras Sofía se encaró hacia la cocina.

Llevaba ya unos minutos revisando las neveras y recogiendo todas las botellas de agua más algún refresco y cerveza para celebrarlo cuando oí un grito de dentro de la cocina. Tiré las botellas que tenía en las manos y salí corriendo hacía allí. Sofía estaba en el suelo con  una mujer infectada vestida de cocinera encima de ella intentando morderla mientras Sofía la aguantaba con sus manos por el cuello. Gritaba sin cesar que la ayudara, que no aguantaba más, así que me dirigí hacia ellas y la pude apartar de una fuerte patada en la cabeza. Cogí a Sofía de una mano y la arrastré para apartarla de la cocinera que se estaba levantando.

[Inca] Vamonos!! hemos de salir de aquí!
[Sofía] Una mierda!, esta hija de puta no me va a sacar de aquí!.

Y con esas palabras Sofía se levantó del suelo y se encaró a la cocinera que venía ya andando hacia nosotros y levantando la mano con la pistola con una gran tranquilidad la disparó en la cabeza dejando toda la pared de atrás salpicada de sangre.

[Inca] Y esto? no nos habías dicho que sabías disparar tan bien.
[Sofía] Con todo lo que me ha tocado pasar, y sobretodo, con aquellos cinco cerdos de aquella casa con Carlos, tenía que aprender a disparar. No me fué fácil la primera vez, pero de todo se acaba aprendiendo.
[Inca] Sabes?, me gusta, eres toda una caja de sorpresas…

Sofía me sonrió y se giró a buscar por los muebles a ver que había como si no hubiera pasado nada. En esos momentos entró como una avalancha Franch cargado con dos pistolas en las manos.

[Franch] Estáis bien?
[Inca] Si, todo solventado gracias a Nikita!, sabe defenderse y disparar muy bien Sofía. Yo ya estaría corriendo al barco.
[Sofía] Bueno, tampoco era para tanto. Y fuistes tu quien me salvó primero cuando me tenía atrapada. Te debo otra inca.
[Franch] Pues nada, si estais bien, venga miremos que hay por aquí rápido y nos marchamos. Ese disparo lo habrán oído a kilómetros y seguro estarán ya viniendo grandes grupos de infectados. El barco ya tiene batería y encontré justo en el barco de al lado dos barriles llenos de gasolina. Así que venga, deprisa!!

A Franch le comenzaba a ver que le estaba gustando coger las riendas de la situación, y en el fondo, nos iba muy bien al resto ya que era la persona con más entrenamiento que teníamos allí. Cogimos varias bolsas de basura y las llenamos con todas las latas y comida que estuviera en buen estado que pudimos cargar y salimos corriendo del restaurante. Nos paramos justo en la puerta, estaba llegando ruidos ya de gemidos, no podían estar muy lejos ya.

[Franch] Vamos, corred!!, suenan lejos aún, pero sí se oyen desde aquí es que han de ser muchos!!!.

No hizo falta esperar contestación, salimos todos corriendo con las bolsas como podíamos haciendo un gran estruendo de latas y envases. Conseguimos llegar al barco y dejamos las bolsas en un rincón. Salí a fuera de nuevo a desatar la cuerda que tenía al barco atado al puerto mientras Franch arrancaba el barco. Salté dentro y comenzamos a apartarnos lentamente del puerto.

Al cabo de unos 20 metros Franch apagó de nuevo motores y vino con nosotros a ver el grupo de infectados. Ya no los podíamos contar por decenas, ni posiblemente por centenas, estaba todo el puerto comenzando a llenar hasta los bordes cayendo algunos al agua por los empujes de los que estaban atrás.

[Silvia] Allí, mirad allí!! es José!!

Nos giramos rápido hacia donde señalaba Silvia, ahí estaba medio cojeando intentando llegar a la costa perseguido por un grupo de más de 50 infectados detrás de él. Mientras caminaba nos intentaba hacer señales para que lo viéramos y Silvia le respondía las señales mientras lloraba de alegría. En cuanto llegó a la costa todos le gritábamos que saltará al agua, que viniera hasta el barco, y José haciéndonos caso saltó sin dudarlo antes de que lo atraparan, pero apenas tenía fuerzas para mantenerse y apartarse unos metros de la costa. Se estaba medio hundiendo cuando Franch saltó al mar de cabeza y comenzó a nadar hasta él, lo cogió por la espalda como un socorrista y poco a poco lo fue arrastrando hasta el barco.


En cuanto llegaron le ayudemos a subir a José que estaba ya inconsciente, y luego a Franch. Silvia no se apartaba de José intentando que se despertara, pero este no respondía.

Comentarios

  1. Y donde esta el resto de capitulos?

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    1. Tienes todo el libro gratis en Google Play libros, y físico en Amazon.

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